El gel antibacterial es un producto cada vez más común que se utiliza para prevenir la propagación de gérmenes y bacterias. Sin embargo, muchas personas no saben cuándo deben usarlo y cuándo no. Aquí te presentamos una guía sobre cuándo debes usarlo.
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Después de ir al baño
Una de las situaciones más comunes en las que debes usar gel antibacterial es después de ir al baño. Las superficies de los baños pueden estar cubiertas de gérmenes y bacterias, y es probable que tengas que tocarlas antes de salir. Además, si no te lavas las manos adecuadamente, puedes llevarte gérmenes y bacterias consigo. Por eso, es una buena idea usar gel antibacterial después de haber estado en el baño.
Después de tocar objetos públicos
Otra situación en la que debes usar gel antibacterial es después de tocar objetos públicos. Por ejemplo, si tocas una barandilla en un transporte público, una puerta en un edificio público o una mesa en un parque, es probable que tengas que tocar objetos que han sido tocados por muchas otras personas antes de ti. Por eso, es una buena idea usar gel antibacterial después de tocar objetos públicos.
Después de estar en contacto con animales aplica gel antibacterial
Otra situación en la que debes usar gel antibacterial es después de estar en contacto con animales. Los animales pueden ser portadores de gérmenes y bacterias, y es posible que tengas que tocarlos o acariciarlos. Por eso, es una buena idea usar gel antibacterial después de estar en contacto con animales.
Antes de comer
Finalmente, debes usar gel antibacterial antes de comer. Esto es especialmente importante si has estado tocando objetos públicos o has estado en contacto con animales, ya que no querrás llevarte gérmenes y bacterias a tu boca. Además, si no te has lavado las manos adecuadamente, es posible que aún tengas gérmenes y bacterias en las manos. Por eso, es una buena idea usar gel antibacterial antes de comer.
Conclusión
En conclusión, el gel antibacterial es un producto útil para prevenir la propagación de gérmenes y bacterias. Debes usarlo después de ir al baño, después de tocar objetos públicos, después de estar en contacto con animales y antes de comer.